Monday, July 02, 2007

Desabrochando...

Con la punta de los dedos,
llemas traicioneras,
arrastran la cremallera que sella ambos labios del placer...
Y las sombras jueguetean viles, despiadadas
y con la sutil forma de esa mujer que sólo en sueños pude tomar.
Ojos atentos alrededor,
entorpeciendo la verdad...
Ojos mutiladores, disparando dardos, señalando la diana...
Centro, centro, cetro de envidias florencen...
Compleja jugada, disfraz de esa boca muda al sentido quinto...
Y muere el nombre de mujer en los límites vérticales del eco que retumba en mi nave industrial...
Y el pensamiento infiel lanzó el guante del duelo sentido...
Allí estaba, retozando entre el fango...
Cuando delante de mí, apareció radiante, sonriente e intocable como siempre...
Un grillo murmuró a mi oído, el cuarto de los sentidos...
La vista se preguntó si era ético delante de la gente...
Y volvió malevolo e infiel el pensamiento diciendo:
se callarán todas las lenguas incluso la mía...,
cuando en mis brazos y manos rindas a tu cremallera una oportunidad...