Thursday, July 10, 2008

Otra memoria

Baile de aguas, allá donde los límites se juntan…

Esa delgada línea que tiende al infinito…

Sombras recónditas,

Vestigios de ditirambos en los versos de este presente tan abrupto

Nace impertérrita la mano que escoge la piedra.

No tires piedras sobre tu propio tejado, gritan los que te quieren…

Posesión de todos sin distinción de género.

Aflige el futuro.

No por cerrar los ojos conseguirás olvidar el dolor.

Esto no es como cuando eras niño o niña y querías que todo pasase contando hasta tres. Siempre se cuenta hasta tres…

Tres a la victoria.

Tres al conjuro.

Tres a Beatriz elevada al cuadrado por Dante.

Tres a los suspensivos.

Tres a la hipnosis. Y duermes.

Tres a las brujas de Shakespeare.

Tres a la tragedia.

Tres las veces que intente olvidarte.

Y tres las que me dejaste.

Por eso apelo a ti diosa, divinidad victoriosa en la lucha contra la piedra

La losa que arrastra el no olvido de todo recuerdo pasado

Laurel coronado de sangre en esa lucha por no olvidar en el futuro

No quería decir tu nombre hasta ahora…

Quizá me olvidé de él…

Maldita memoria… mujer caprichosa